Los precios locales de granos con ritmo propio

Los precios locales de granos con ritmo propio

Mientras que el mercado externo de referencia muestra volatilidad, los precios en Argentina continúan firmes por la lenta oferta y la gran demanda. La atención ya se vuelca al 2016/17.

 

El comportamiento de los precios de los granos continúa siendo mayormente favorable más allá de alguna toma de ganancias o el impacto de alguna variable externa como puede ser la evolución del dólar frente a las demás monedas.

Los commodities agrícolas tienen un gran condimento de factores fundamentales propios que le suman volatilidad a los precios para que los operadores tomen posiciones.

Los fondos se muestran con una gran actividad en la operatoria diaria por los flujos de dinero que ingresan y egresan de los mercados, sin ser los commodities una excepción.

Los grandes especuladores mantienen una posición neta comprada en los mercados de maíz y soja de Chicago, mientras que continúan vendidos en el trigo.

El posicionamiento no hace más que reflejar el contexto donde el trigo tiene una gran disponibilidad en el mundo y tanto la soja como el maíz encuentran sostén en la menor oferta sudamericana (a la inicialmente proyectada).

Además a los mencionados factores hay que sumarle el rol que comienza a jugar el clima en EE.UU. para los granos gruesos.

Las siembras de maíz y soja están desarrollándose levemente por debajo del avance del año pasado a la misma fecha pero arriba del promedio de los últimos cinco años.

El clima en las regiones productoras es el que está moviendo las agujas de las cotizaciones al especularse que si hay demora en la cobertura de la superficie de maíz algunos acres se sembraran con soja.

Los datos de los acres de siembra del ciclo 2016/17 recién se actualizarán oficialmente por el USDA el próximo 30 de junio, mientras tanto el análisis de los operadores e informes privados son los que darán la pauta de la superficie finalmente implantada con granos gruesos.

Con la reciente suba de precios superior en los futuros de soja en relación al maíz, llevando la relación a 2,66 frente a los 2,33 de hace dos meses atrás, hace pensar que algunos productores estadounidenses puedan cambiar sus siembras.

La suba del precio de la soja no hizo más que responder a la menor proyección inicial del USDA de siembra publicada el 31 de marzo y a la situación en Sudamérica.

La producción sudamericana fue recortada en 3,8 M ton en el último informe del USDA, para aumentar respecto del ciclo anterior tan solo en 3,5 M ton cuando inicialmente se hablaba de 7,3 M ton.

El incremento de la oferta fue más que compensado con las proyección de la demanda que, como consecuencia, disminuyo los stocks finales del ciclo 2015/16 al que se le sumo una proyección inicial 2016/17 de mayor oferta pero con más demanda que ajusta otra vez stocks finales.

Los guarismos fundamentales son el principal sostén de los precios mientras que se suma la volatilidad que agregan los factores externos y el clima.

Según los meteorólogos del NOAA aumentaron las probabilidades de ocurrencia del fenómeno La Niña en los próximos meses cuando los cultivos estadounidenses estén desarrollándose.

 

Argentina en otro mundo

Mientras que los precios en el mercado externo de referencia muestran vaivenes aunque con cierres semanales mayormente positivos, los precios en el mercado local continúan firmes.

La soja disponible llegó nuevamente a los $ 4.000 y el maíz, luego de algunas jornadas con bajas, regresó a los $ 2.800 impulsados ambos por la menor oferta ante una activa demanda.

La menor oferta responde al lento avance de la cosecha de ambos cultivos, aun cuando los productores privilegian la recolección de la oleaginosa frente al cereal.

Al jueves pasado el Ministerio de Agroindustria informó un avance de la recolección de 65% de la soja frente al 89% del año pasado a la misma fecha y del 28% del maíz frente al 46% del 2015.

Además se le suman los problemas en los caminos que muchos productores están cosechando pero no pueden sacar los granos de los campos y los camiones que llegan a los puertos no alcanzan para abastecer la necesidad de exportación.

En las terminales portuarias en los próximos días deberán arribar barcos para embarcar 2,9 M ton de maíz, 2,45 M ton de poroto de soja, 2,3 M ton de harina de soja y 305 mil ton de aceite de soja.

La demanda de los productos no puede esperar y hacer frente a los mayores costos que esto representa, motivo por el cual los precios se mantienen firmes y hasta se pueden obtener diferenciales de precios por negocios puntuales.

Sin embargo, hay muchos productores que no pueden aprovechar estos valores, ya sea por no poder cosechar, no poder sacar la mercadería de los campos o por las pérdidas productivas.

Para todos ellos las esperanzas no se deben perder.

Los precios de la soja local se mantendrán firmes en los próximos meses más allá de alguna corrección en las próximas semanas por una mayor presión de cosecha.

Los precios futuros nos muestran que podríamos despegarnos de un contexto externo a la baja y potenciarnos hacia las subas.

La oferta argentina es menor este año, por producción y stocks, con demanda activa por parte de la exportación y la industria y la recuperación llegara recién en el 2017.

Si bien se habla de una menor siembra 2016/17, la reciente suba de precios cambió los números de algunos productores que volverán a apostar a la soja de primera o a la de segunda luego del trigo.

Con los cambios recientes de precios están a la orden del día las planillas de cálculo para las proyecciones del próximo ciclo.

Hasta hace algunas semanas el maíz corría en punta, segundo el trigo/soja y luego la soja. Hoy en algunas estructuras los números se ajustaron.

Igualmente ante cualquier cálculo es necesario no solo mirar los precios actuales para el futuro sino también mirar los precios futuros en el futuro.

Con el contexto futuro para el 2017, los precios actuales futuros de maíz y de trigo son buenos para realizar algunas coberturas futuras, así también lo está leyendo el mercado con operaciones forward estimadas en 2 M ton de maíz y 300 mil ton de trigo.

Entonces ¿Qué hacemos? Conozcamos bien nuestras necesidades financieras y alternativas disponibles para no apresurarnos a vender los granos.

Para el maíz vemos precios firmes por la menor oferta en la actualidad que se puede acabar con la cosecha tardía o de segunda a partir de fines de junio y para el trigo una presión cuando haya más claridad sobre las proyecciones 2016/17.

En el mientras tanto si ya pensamos en el 2017 hay oportunidades de coberturas y para quedarnos tranquilos con la soja comprar algún put a noviembre nos permitirá poner un piso en el precio futuro.

Lo que viene…

En el mercado externo la menor oferta en Sudamérica y esta incorporado e los precios. La atención ahora se enfoca en la finalización de las siembras en EE.UU. y el desarrollo del clima.

Sin embargo, otros factores importan en el mercado:

  • Evolución del dólar
  • Posición de los fondos
  • Demanda de exportación de EE.UU.
  • Cosecha final en Sudamérica
  • Competitividad de precios FOB
  • Avance de cosecha en Argentina
  • Ventas de productores argentinos
  • Siembras de trigo en Argentina