Atentos a las oportunidades del clima en EE.UU.

Atentos a las oportunidades del clima en EE.UU.

El mercado climático estadounidense puede dar oportunidades de mejores precios para los productos agrícolas pero también de bajas. Estar preparados para actuar es la mejor recomendación.

 

En una semana más corta para el mercado estadounidense donde cerró el mes de mayo y comenzó junio, los precios de los granos en Chicago operaron con cambios atados a la volatilidad que genera el clima y sus pronósticos en los cultivos que se están desarrollando.

En EE.UU. los productos tienen distintas etapas pero en todas ellas las condiciones climáticas afectan en alguna medida.

Para la soja, el maíz y el trigo de primavera importa para la finalización de las siembras y la emergencia de los cultivos, mientras que para el trigo de invierno el clima es clave para el comienzo de la cosecha y la aparición de enfermedades de fin de ciclo.

Así todo lo relacionado con el clima tiene impacto en el comportamiento de los precios en el mercado de referencia como paso esta semana.

Con lluvias los precios bajan mas para la soja que para el maíz mientras que el clima seco hoy impacta negativamente par todos los productos.

El informe semanal del USDA sobre los cultivos es esperado por los operadores para posicionarse en el mercado. Con el primer reporte de la semana pasada sobre la condición de los cultivos de maíz, debajo de lo esperado por el mercado en la categoría de bueno a excelente, le dio un parcial soporte a los precios del cereal.

Igualmente el balance semanal fue levemente negativo, acompañado por la soja, siendo la excepción el trigo que muestra preocupación por el número que tendrá la cosecha estadounidense luego de la fuerte baja en el área de siembra y el impacto del clima.

Con el clima como el factor principal que mueve el mercado, el cambio en otras variables pasa a un lugar secundario pero que no deben dejar de considerarse.

La evolución del dólar respecto de las demás monedas en el mundo, la demanda por parte de China, la política de la OPEP, son entre otras noticias las que pueden impactar en el precio de los productos agrícolas.

También el USDA publicará esta semana la actualización de sus estimaciones mensuales que llevan a los operadores a posicionarse en el mercado. Recordemos que los fondos especuladores tienen en el mercado de Chicago posiciones netas vendidas en trigo, maíz y soja, aumentando en la última semana según el informe del CFTC.

Las posiciones vendidas que confirman el accionar mayormente bajista de estos operadores es también un indicador que puede ser alcista de cambiar algunas variables en el mercado.

Si en EE.UU. no se puede sembrar lo inicialmente proyectado por el clima o las condiciones climáticas no acompaña el desarrollo de los cultivos, una menor oferta en el ciclo 2017/18 puede impulsar las cotizaciones futuras frente a una demanda que crece.

Entre los factores que limitan posibles subas se encuentra la gran oferta global de los granos por los stocks récord, siendo los datos de Sudamérica claves para el mercado.

En Brasil la cosecha récord de soja, cuya oferta aumentó en las últimas semanas por las mayores ventas de los productores, mantiene bajos los valores de exportación en el mercado.

La presión se espera aun mayor en el mercado del maíz con el avance de la cosecha de safrinia que recupera la producción pedida el ciclo previo alcanzando un récord que se suma al maíz de primera para llegar hasta los 100M ton como proyectaron analistas brasileros la semana pasada.

La cosecha brasilera presionara aún más los valores por el ingreso en el mercado exportador ante un saldo proyectado en 34 M ton que competirá con la oferta estadounidense y argentina.

Este ciclo nuestro país tiene un saldo exportable de maíz de 28,5M ton a partir de una cosecha proyectada según datos oficiales en 46,5M ton.

Del volumen para exportar ya se presentaron DJVE por un total de 10,5 M de ton, es decir, tan solo un 37% de la proyección necesaria para absorber la oferta récord.

Por otra parte, el sector exportador lleva compradas 13,4 M ton de maíz, un 17,5% arriba del año pasado a la misma fecha.

La posición neta comprada que se observa auguraría una demanda más tranquila en el mercado de no aumentar las ventas al exterior en los próximos mees como se espera por la competencia brasilera.

De todas formas el accionar de la demanda externa dependerá de los valores FOB que se ofrecen en el mercado. El maíz argentino para embarque más cercano cotiza en usd 162 por tonelada FOB mientras que para embarque julio dicho valor cae hasta los usd 154.

Los menores precios se traducen en valores más bajos para los futuros de maíz en el mercado del MATBA con un inverso que debería motivar las ventas de los productores, aunque muchos de ellos esperan la oportunidad que puede dar la volatilidad del mercado climático estadounidense.

Sin embargo, la volatilidad también puede generar precios más bajos para un producto con una gran oferta en Argentina donde el 50% de la cosecha todavía no está en el mercado.

El retraso en el ingreso al circuito comercial hizo que los precios del cereal se mantuvieron hasta llegar a los $ 2.520 pero en los últimos días el precio de $ 2.350 muestra que las oportunidades serán menores.

El sostén de los precios estuvo mayormente dado por el tipo de cambio ya que en dólares el maíz bajo de los usd 150 de hace quince días hasta los usd 144 actuales.

La diferencia igualmente fue más notable en el mercado de la soja que en dólares paso de usd 244 a usd 235 para recuperar hasta los usd 239 en el último día de la semana, mientras que en pesos paso de $ 3.880 a $3.900.

Frente al contexto de valores distintos, el productor no debe engañarse. La devaluación del peso ayuda pero no compensa la caída de los precios en los mercados agrícolas.

El mercado de soja continúa mostrando pases positivos para realizar estrategias en el futuro mientras que el maíz nos muestra que la postergación de la venta es la peor de ellas cuando ya se está analizando el futuro 2017/18.

 

El futuro del trigo

Comenzando el mes de junio empieza el ciclo 2017/18 con las siembras finas en un contexto de dificultad en la implantación por excesos de humedad en muchas zonas.

A las intenciones de los productores de aumentar la cobertura con cereales se le contrapone el clima que limita la actividad en los campos, y se refleja en distintos informes privados.

Las Bolsas, que proyectaban aumentos en el área de siembra, señalaron la última semana la demora en las siembras que impactan en la probabilidad de alcanzar las intenciones iniciales. En la zona que releva la Bolsa de Comercio de Rosario se estima una caída del 10 a 20% respecto al año pasado por el impacto del clima.

El Ministerio de Agroindustria en su informe mensual de mayo proyecta una caída del 5,7% en el área de siembra de trigo 2017/18 hasta las 6 M de hectáreas respecto de las 6,36M del ciclo anterior.

Con una cobertura futura todavía incierta, los precios del trigo nuevo se mantienen en niveles cercanos a los usd 160, valor que acompañado por una siembra de soja de segunda se convierte en la mejor alternativa para muchas zonas productivas.

A la diversificación de los cultivos se le suma el auxilio financiero que se obtiene a fin de año con el ingreso del cereal que actualmente muestra precios cercanos al promedio del presente ciclo.

Según información del SIOGRANOS ya se negociaron anticipadamente 690 mil ton de trigo 2017/18 en negocios forward frente a los 450 mil ton del año pasado a la misma fecha.

 

Lo que viene…

El mercado está ingresando al mercado climático estadounidense con la volatilidad que eso representa para el predio de los granos, con oportunidades de subes que no deberán desaprovecharse pero también con posibilidades de bajas para actuar.

Las variables de seguimiento en el mercado son:

–          Clima en EE.UU.

–          Situación de los cultivos en EE.UU.

–          Posición de los fondos especuladores

–          Cosecha de maíz en Brasil

–          Ventas de productores

–          Tasa de interés y dólar en Argentina

–          Siembras de trigo